by Miss Who
El show se celebró en vivo desde Los Ángeles, California y como es habitual, las celebridades arrivaron temprano para desfilar por la alfombra roja. Algo que no pasa desapercibido nunca es la moda, y entre algunos aciertos y algunas metidas de pata, las actrices compiten a ver quién es la más elegante, y por supuesto, la mayor espectativa se genera entre las nominadas. Como suele suceder todos los años: hubo de todo.
Los colores fueron infaltables en la alfombra roja. Rojos, verdes, metalizados, brillantes, los siempre presentes blanco y negro. Veamos las tendencias más destacadas de la noche.
El blanco siempre es protagonista en estos eventos, y fue bastante popular anoche en la gala del Oscar. En distintos modelos, con brillantes, varias actrices optaron por usarlo. Rooney Mara usó un vestido con cola de Givenchy; Mila Jovovich optó por un vestido drapeado y brillante de Ellie Saab, y la ganadora al Oscar por Mejor Actriz de Reparto, Octavia Spencer, con un traje brillante de Tadaschi Soshi. Por otro lado Shailene Woodley, protagonista de Los Descendientes, y Gwyneth Paltrow, apelaron a las siluetas más simples y minimalistas. Woodley con un Valentino Haute Couture, y Paltrow en un Tom Ford.
En diferentes tonalidades y formas, otro color que estuvo muy presente fue el rojo. Michelle Williams con un vestido en capas de Luis Vuitton, mientras que Emma Stone lució un traje de Giambattista Balli con un lazo al cuello, muy similar al Balenciaga que uso Nicole Kidman unos años atrás. La ganadora del Oscar, Natalie Portman utilizó un vestido rojo con lunares negros de Dior; Livia Giuggioli, la esposa del ganador del Oscar Colin Firth, optó por un Valentino, y la nominada a mejor actriz de reparto, Janet McTeer vistió un modelo simple de David Meister Signature.
Tampoco nunca faltan los tonos pasteles, y los adornados de paillettes. Varias actrices, tales como Rose Byrne en Vivienne Westwood, Bérénice Bejo y Kate Mara en Ellie Saab, y Leslie Mann en Roberto Cavalli. También hubo algunos vestidos metalizados presentes, tal como el de la ganadora del Oscar a mejor actriz, Meryl Streep, que lució un Lanvin en color oro para combinar con el oro que se llevó a casa. Y la novia de George Clooney, Stacey Kiebler resaltó con un vestido recién salido de la pasarela de la última colección de Marchesa.
Por último, el color que nunca pasa de moda y siempre es una apuesta segura: el negro. Una elegante y sexy (aunque extremadamente flaca) Angelina Jolie en un revelador Versace. Tina Fey optó por Carolina Herrera, y Melanie Griffith apuntó a lo sobrio y elegante con un Yves Saint Laurent.
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