Review: ‘El Hobbit: Un Viaje Inesperado’

Película: The Hobbit: An Unexpected Journey (El Hobbit: Un Viaje Inesperado) 

Dirección:Peter Jackson 

Guión: Peter Jackson, Philippa Boyens, Fran Walsh y Guillermo del Toro 

Reparto: Ian McKellen, Martin Freeman, Richard Armitage, Orlando Bloom, Luke Evans, Hugo Weaving, Christopher Lee, Cate Blanchett, Benedict Cumberbatch, James Nesbitt y Ken Stott.

Con muchas expectativas, y siendo gran fanática de Peter Jackson y J.R.R. Tolkien, estaba dispuesta a defender esta película a cualquier costo. Sin embargo, después de haber visto el film puedo decir que El Hobbit: Un Viaje Inesperado no sólo es una película para todos los públicos, sean fanáticos o no, sino que para aquellos fieles seguidores de este gran universo fantástico, es un digno regreso a la Tierra Media.

La historia de El Hobbit cuenta las aventuras de Bilbo Baggins y un grupo de Enanos que se lanzan en un viaje para recuperar su hogar ancestral de las garras del temible dragón Smaug. Al tiempo que la película sirve para contar la aventura que vivirán estos personajes, se las ingenia demasiado bien para sentar las bases de ciertos acontecimientos que nos llevarán a entender varios de los sucesos de la trilogía de El Señor de los Anillos. Es decir, que se podría decir que esta nueva trilogía funcionará a modo de precuela, al igual que ocurrió con Star Wars.

Como sucede con toda adaptación cinematográfica, especialmente una que ya tiene su exitosa  progenitora, y que dejó su huella en la historia del cine, se vuelve algo difícil volver a este mundo y no tener grandes expectativas. Afortunadamente, Peter Jackson junto a Fran Walsh, Philippa Boyens y Guillermo del Toro, han hecho un buen trabajo dividiendo la estructura narrativa del libro en la proporción justa y necesaria para constituir una nueva trilogía (que originalmente iba a estar retratada en dos películas). Cabe mencionar que, para aquellos que desde un principio han argumentado que la historia es demasiado corta para tres filmes, no hay que olvidar que también se ha utilizado material de los Apéndices que se encuentran al final de El Retorno del Rey, lo cual sirve para dar la profundidad que la historia necesita.

A diferencia de lo que se cuenta en el Señor de los Anillos, El Hobbit es la clásica aventura que tiene como finalidad una búsqueda o supuesto logro; y en este caso, la historia tiene un tono mucho más relajado, con humor, variados personajes y bastante acción. A juzgar por Un Viaje Inesperado no sólo estamos en buenas manos, sino que constituye un buen punto de partida de la historia. Lo interesante de esta nueva adaptación, es que está construida de forma muy similar a su predecesora. La cinta arranca con un increíble prólogo que cuenta un poco de historia, muy similar a lo que se vio en La Comunidad del Anillo.

De igual manera, vemos que a lo largo de la historia se van abriendo tres caminos: el del héroe y protagonista, Bilbo; el de el segundo protagonista, Thorin Oakenshield; y por supuesto, Gandalf (igual que con Frodo, Aragorn y Gandalf).

De regreso en la Comarca, unos 60 años antes de los sucesos ocurridos en la trilogía, nos encontramos con un joven Bilbo Baggins, interpretado por Martin Freeman. Freeman retrata a Bilbo con una naturalidad y convicción que pareciera que el personaje estuviera hecho a su medida, y dota al joven hobbit con esa evasiva y curiosa personalidad  que tan bien lo caracteriza. Recluido en su hogar y sin ambición alguna de aventuras, Bilbo es reclutado por Gandalf y los enanos para oficiar del ladrón que necesitan para concretar su aventura. Es interesante ver cómo a pesar de que nunca llega a convertirse en un habilidoso guerrero o líder, eventualmente se arma de coraje para seguir adelante con esta empresa.

También al comienzo se nos introduce al segundo protagonista de la historia, el líder de los enanos, Thorin Oakenshield, interpretado por Richard Armitage. Este actor también deja lo suyo en el personaje, y Jackson le dedica una buena cantidad de tomas para que lo demuestre. Un héroe forzado al exilio que busca a cualquier costo recuperar Erebor, el hogar que largo tiempo atrás le fue arrebatado. Thorin, a diferencia del resto de los enanos, es mucho más serio, y este aspecto de su personalidad está muy bien retratado al contar parte de su historia pasada lo cual nos lleva a entender por qué es cómo es, y las ambiciones que tiene.  

Y por supuesto, no podía faltar el personaje que todos amamos y añoramos, Gandalf the Grey, una vez más traído a la vida por el gran Ian McKellen. Al igual que en el Señor de los Anillos, el mago no sólo tiene su propia ruta, sino que es el encargado de unir los caminos de los otros dos protagonistas entre sí.

En tanto, uno de los grandes retos que debe haber enfrentado Jackson a la hora de trasladar esta historia a la pantalla grande, es la cantidad de personajes que se suman a esta nueva aventura. Varios de ellos quedan relegados a un segundo plano, a excepción de tres o cuatro de ellos. Con pocos diálogos, todos y cada uno de ellos (Peter Hambleton, John Callen, Ken Stott, Graham McTavish, James Nesbitt, William Kircher, Aidan Turner, Dean O’Gorman, Mark Hadlow, Jed Brophy, Adam Brown y Stephen Hunter), aportan el toque humorístico que posee la cinta. Esto se complementa con la fantástica caracterización de estos personajes, que hace posible la identificación individual de estos enanos. Algunas escenas parecen un tanto forzadas para provocar ese tono humorístico, pero está perfectamente justificado por la intención de llegar a un público mucho más extenso, inclusive más infantil.

En cuanto al resto de los personajes, hay caras familiares y otras no tanto. Durante el prólogo hace aparición un personaje que no esperábamos ver hasta la segunda película. La sorpresiva presencia viene de la mano de Lee Pace como el Rey del Bosque Negro, Thranduil. Por su parte, Sylvester McCoy, da vida al torpe y distraído mago Radagast el Pardo; y Barry Humphries logra su cometido como el Rey Trasgo, con un diseño poco atractivo a la vista.  

Una de las mejores escenas de la cinta es sin duda el Concilio Blanco.  La llegada de los personajes a Rivendell, muestra el lugar en todo su esplendor, y nuevamente sentimos que estamos de regreso. Aquí vemos a Gandalf reunirse con Galadriel (Cate Blanchett), Saruman el Mago Blanco (Christopher Lee) y Elrond (Hugo Weaving). Esta secuencia es particularmente importante ya que no sólo nos conecta con la trilogía de El Señor de los Anillos, sino que constituye el puente que nos va a permitir concebir ambas historia como una sola.

No podía faltar la memorable escena de Acertijos en la Oscuridad. Una vez más, Andy Serkis, se mete en la piel de Gollum para revivir a este icónico personaje y producir el primer encuentro con nuestro héroe.

Vamos a hablar un poco de los aspectos visuales. Ya hace bastante tiempo que se viene hablando de los 48fps (fotogramas por segundo), 3D y demás. Tuve la oportunidad de ver la película en 3D y en el nuevo formato. Pero antes de decir qué me pareció vale tener en cuenta unas consideraciones previas.

En primer lugar, hay que reconocer que fue una movida bastante arriesgada y atrevida por parte de Jackson y los estudios, de traer a la vida una saga como esta y apostar a una tecnología tan nueva. En segundo lugar, y ligado a esto último, hay que tener en cuenta que esto aún se encuentra en una fase experimental. Recordemos que esta es recién la primera instancia de la trilogía, así como el primer largometraje que se exhibe en este formato, y ya va a quedar tiempo para seguir perfeccionándolo. Y por último, la osada decisión del director merece cierto crédito, ya que no sólo estamos hablando de una innovación que eleva la experiencia cinematográfica, sino que en cierto punto supone la ruptura de un paradigma de casi 80 años en la historia del cine.

¿Qué me parecieron los 48fps o HFR (Imágenes en Alta Frecuencia)?

La verdad es que la imagen se ve con mayor claridad, mucha definición, e increíble minuciosidad de detalles. Esto permite que las secuencias de acción y escenas de batalla se vean mucho más claras y que captemos toda la acción, y que no se vea medio borroso como sucede en ciertas ocasiones en las que hay mucho movimiento de cámara. Inclusive, el efecto 3D se siente mucho más suave a la vista y mucho más fluido.

Tal vez, algo que le juega en contra a este formato es que no queda margen de error. Así como todo se ve con mucha más definición y detalle, de igual manera se ven los efectos. Hay algunos efectos que se ven espectaculares, mientras que hay otros que no tanto y esto se nota en ciertos personajes. Pero en líneas generales, me fascinó, definitivamente me gustaría ver más largometrajes en este formato y ver qué otras utilizaciones se hacen del mismo.

Y por supuesto, no sería un merecido regreso a la Tierra Media si no fuera por el soundtrack compuesto por Howard Shore. Es cierto que una imagen vale más que mil palabras, pero el poder de la música, la capacidad de crear tención, felicidad, grandilocuencia y hasta tristeza no se puede negar. En gran parte el éxito de la música se debe a las melodías que ya conocíamos de la trilogía anterior y que nos vuelven a trasladar a este universo. Se puede identificar la música de la Comarca, las melodías que introducen a los Elfos o las águilas, así como también nuevas piezas que identifican a los enanos y nuevos villanos.  

Veredicto final: es una película excelente. Realmente superó mis expectativas, no le faltó nada y creo que cualquier fanático de Tolkien o Peter Jackson va a estar más que satisfecho con este nostálgico regreso a la Tierra Media. También, me parece una oportunidad perfecta para acercar a las generaciones más jóvenes que no pudieron disfrutar de la trilogía; e inclusive para iniciarse en la lectura de los libros. Si hay alguna cosa que podría criticar como algo negativo, es tener que esperar otro año para poder disfrutar de la segunda parte.